martes, 24 de noviembre de 2009

NO DESEARÁS


Capítulo 15. Emmett

Bella POV

Entre a la casa y comencé a guardar algo de ropa en un bolso, mientras luchaba por quitar las lagrimas de mis mejillas, ella no debió enterarse así...¿por que?, Edward me había dicho que me amaba y ahora yo lo único que podía pensar era alejarme de el… alejarme de todo, sabia que era cobarde, a fin de cuentas había herido a Rosalie, la había perdido para siempre, pero no podía estar ahora con Edward… mi corazón le pertenecía, mi cuerpo y mi alma pero ahora eso dolía… algo tan hermoso no podía ser un error, no podía dañar tanto a alguien, veía la cara de Rosalie una y otra vez, su decepción, su dolor, su odio, aun sentía su mano en mi mejilla, me sentía sucia… no por Edward pero si como amiga. Era demasiado confuso para permanecer aquí.

Salí de mi departamento y subí a mi auto, la noche era fría y oscura, trate de tranquilizarme un poco antes de conducir, pise el acelerador a fondo olvidándome de lo poco que me gustaba la velocidad, solo quería salir, sabia que estaba huyendo, era cobarde, lo problemas no desaparecían pero yo quería tratar de desaparecer al menos por un momento.

Maneje casi toda la noche, los ojos me ardían y mi garganta estaba seca… vi el amanecer justo antes de entrar a Seattle, minutos después estacione el auto en casa de Alice y ella salió a recibirme para mi sorpresa, corrió y me abrazó mientras me derrumbaba en sus brazos, quede arrodillada en el jardín, ella me envolvió y solloce en su pecho.

-Lo sabe… lo descubrió… ella me odia…-, le susurraba sin sentido, mi hermana no dijo nada en ese momento solo me abrazó y ayudo a que me calmara.

Después de unos minutos entramos a la casa, me sentí avergonzada al mirar a Jasper desayunando en la cocina, el me sonrío tenuemente, se despidió de Alice y salio de la casa.

Fuimos hasta la sala, me dejo ahí por unos minutos y regreso con una taza de café, se sentó a mi lado y quito mis cabellos del rostro.

-¿Qué paso Bella?-, susurro en tono maternal… eso era mi mamá, mi hermana, la única familia que me quedaba.

--No pude alejarme Alice… lo amo como nunca podré amar a nadie… pero ella nos vio, el había terminado con ella pero jamás quisimos que lo supiera…-, ella me acaricio la espalda tenuemente.

-Bella tienes que tranquilizarte… ella lo entenderá en el corazón no se manda-, susurro Alice mientras yo negaba con la cabeza.

-No… yo la traicione, le quite el amor de Edward… ella me odia… lo dijo… sus ojos no mentían-, solloze mientras Alice me abrazaba.

-Tranquilla hermanita… necesitas calmarte-, dijo contra mi cabello con la voz débil, la mire y ella limpio mi mejilla

-Quédate lo que quieras… pon en claro tu cabeza y tu corazón… en el corazón no se manada… eso es lo único que debes tener en claro…-, me abrazó y me acurruque en su regazo… permitiendo que el cansancio me venciera, casi sonreí al notar aun el vestido de fiesta, me perdí en la inconciencia mientras veía el rostro de Rosalie… el de Edward… el debía odiarme pero yo no podía verlo, no ahora.

Alice me despertó por la tarde para comer algo, me rogó para que ingiriera algún alimento, me esforcé por complacerla y después me llevo a una habitación desocupada, me cambie de ropa y me metí a la cama, solo quería dormir, y olvidar, era deprimente, cobarde… lo sabia y eso me hundía aun mas.

Al día siguiente me levante y fui hasta la cocina por un vaso de agua… ahí se encontraba Jasper, baje la mirada y el espero pero yo no articule palabra.

-Buenos días Bella-, susurro tomando un poco de café.

-Buenos días… eh… quería pedirte perdón… por las molestias-, comencé pero el negó con la cabeza.

-Eres nuestra familia Bella, Alice te ama, haría cualquier cosa por ayudarte-, sonreí ante sus palabras y baje la mirada.

-Bueno la verdad es que a ti te ama mas de lo que puedas imaginar-, le susurre y el sonrío de una forma particular.

-Aun así sigo siendo el segundo lugar Bella… y eso me hace feliz si ella lo es… quédate el tiempo que quieras… no miento cuando digo que eres nuestra familia… se que no nos conocemos mucho pero amo a tu hermana y quiero que tu me consideres un amigo si no un hermano un buen amigo-, susurro extendiendo la mano, yo la estreche y le sonreí con los ojos llorosos, no merecía esto… aunque una parte de mi supo que Alice había encontrado al mejor hombre posible… Jasper me hizo recordar a Edward la manera como acariciaba el nombre de mi hermana… necesitaba salir de ahí antes de explotar.

-Pensaba ir a caminar… puedes avisarle a Alice-, le dije mientras el se servia un poco mas de café.

-Si no te preocupes… no tarda en despertar-, sonrío y yo asentí saliendo de la casa.

Camine unas cuadras hasta un parque donde varias personas hacia caminatas matutinas, había gente haciendo ejercicios y aeróbicos mientras que otros corrían a los alrededores.

Me senté en una baca de piedra mientras dejaba que la brisa me ayudara un poco sin darme cuenta sentía la humedad de mis lagrimas y la seque, limpie mis ojos y trate de distraerme, me hice un moño en el cabello y mire a las demás personas absortas en sus actividades.

-¿Eres tu hermanita?-, pregunto un hombre parado a mi lado, iba a negar con la cabeza hasta que mi mirada se encontró con la suya, sus anchos y musculosos hombros, su cabello corto y rizado y esos dos hoyuelos, Emmett había cambiado ahora era un hombre un poco distinto del chico que conocía pero era el.

-Emmett…-, susurre y el asintió, me levante y le di una abrazó y el separo mis pies del suelo como siempre lo hacia.

-Bells, ¿Vives en Seattle?-, pregunto confundido mientras nos sentábamos.

-No… en Phoenix-, susurre y el rodeo los ojos.

-¿Y que haces aquí?-, pregunto con gesto tonto a lo que yo sonreí.

-Huir…-murmuré para mi misma, sentí su mirada y trate de concentrarme y evitar llorar frente a el.

-Alice vive aquí-, le dije y el asintió.

-¿Cómo has estado?-, pregunto mientras tomaba algo de agua de una botella.

-Estudie en Francia por tres años... hace poco menos de dos meses que regrese-, le dije tragando el nudo en la garganta.

-Y tu…-, susurre tratando de desviar la conversación.

-Trabajo en una escuela… soy entrenador deportivo…-, sonrío y yo le correspondí.

-Jamás creí volver a verte-, exclamo con una sonrisa.

-¿Por qué te fuiste así?...-, le pregunte con el ceño fruncido, el estaba feliz, con Rose, la escuela, sus amigos y después… nos informaron que se había mudado así sin mas.

-Mi mamá… sufrió un ataque… ella no logro volver a tener la movilidad de una parte de su cuerpo… nos mudamos aquí… para su tratamiento… pero ella no duro mucho-, comento con la voz seria viendo hacia la nada.

-Jamás lo dijeron…-, le susurre y el río fuertemente.

-Lo se… por ello Rose jamás me contesto las llamadas… jamás pude explicarle… nunca la hubiera dejado de haber tenido la oportunidad-, la sola enunciación de su nombre me hizo querer salir de ahí.

-Ella… vino contigo-, inquirió Emmet en tono bajo.

-No…-, le susurre y el miro de nuevo a la gente.

-Sabes que nunca ha habido nadie mas… intente olvidarla… pero no pude-, se encogió de hombros y volvió su rostro hacia mí.

-Ahora ya son demasiados años… perdí a mi chica-, dijo en tono bajo y yo desvíe la mirada.

-Debiste buscarla-, fue mas un reclamo que un consejo.

-Creí poder superar un enamoramiento de escuela Bells… que estupido-, susurro y yo negué con la cabeza.

-Ella es feliz-, pregunto y yo desvíe la mirada.

-Emmet no…-, le dije con la voz entrecortada.

-Bella que pasa-, dijo tomándome mi cara entre sus manos.

-Ella intento hacerlo Emmett, intento realizar sus sueño... recuerdas… un hombre que la amara… una familia-, le susurre mientras en su mirada cruzo una ráfaga de dolor.

-Lo consiguió…-, susurro como una afirmación.

-No… yo lo arruine…-, le conteste y el me miro confundido.

-Cuando regrese de Francia ella llevaba un año viviendo con Edward… su novio-, Emmett tenso su mandíbula pero me permitió continuar.

-Al principio pensé que eran la pareja perfecta-, me reí irónicamente y me limpie la mejilla

-Me enamore de el Emmet... Edward y yo…-, susurre y el me miro entendiendo todo… yo baje la mirada y por una segundo solo hubo silencio, un desgarrador silencio.

-Rosalie lo supo…-, concluyo entre dientes.

-Si… te lo juro que jamás quise hacerle daño…-, solloce y el me abrazó envolviéndome con sus grandes brazos.

-No te estoy juzgando Bella, se que amas a Rose…-, susurro y yo negué con la cabeza.

-No le haces esto a los que amas, a tu familia-, sisee molesta.

-El dolor viene implicado con el amor… es un pequeño precio… yo amaba… amo a Rosalie y aun así la herí…-, susurro y miro de nueva al frente.

-Ella debió saber-, le susurre y el sonrío.

-Cuado encontré el valor para enfrentarla… pensé que ya era muy tarde… y mira ella había encontrado a otra persona-, dijo desviando la mirada.

-Ella aun te ama… no se hasta que punto llego a amar a Edward pero fue distinto a lo que tuvo contigo-, le susurre y el me miro por un segundo antes de saltar de la banca y sonreír como un niño apunto de hacer alguna travesura

-Tienes quien te lleve a la casa de Alice-, pregunto y yo negué.

-Vamos te dejo de camino-, yo me lévate titubeante y lo seguí aun confundida por el cambio repentino.

Emmett abrió la puerta de un Jeep y yo subí con algunos trabajos a lo que el soltó una risotada, le indique el camino a la casa de Alice y en menos de lo imaginado estaciono el gran auto frente a la cochera.

-Sabes por que me enamore de Rose-, pregunto y yo negué con la cabeza.

-Me gusto desde el primer día que la vi tan segura de si misma… tan ella… pero eso no gano mi corazón, lo hizo su amor por un sueño tan simple, una mujer como ella… la ves por la calle y la juzgas al instante, pero a ella solo le interesaba formar un familia, tener unos bellos gemelos y darles todo…-, termino en tono bajo con una sonrisa.

-Emmett…-, rogué intentando que parara, yo lo sabia mejor que nadie… todo lo que ella había perdido, todo por lo cual Edward era una oportunidad después el hombre sentado a mi lado.

-No es personal Bella, solo te digo que me ayudaste a despertar… gracias-, susurro y yo fruncí el ceño

-Anda la enana espera-, me indico señalando a Alice que estaba parada en la entrada de la casa. Sonreí y me dispuse a abrir la puerta del Jeep, me volví hacia el y el sonrío.

-¿Qué vas a hacer Emmett?-, pregunte confundida

-Viajar Phoenix hermanita… no es tarde... aun no-, dijo y yo lo abrace mientras el apretaba su agarre.

-Será mejor que mantengas a tu chico fuera de mi alcance… aun sigue siendo un idiota por engañar a mi chica-, amenazo y yo me separe iba a comenzar a rebatir a favor de Edward cuando el río.

-Relájate Bells… es broma-, dijo mientras yo negaba la cabeza, baje del Jeep y me despedí con la mano, camine hasta Alice que me miraba totalmente seria.

-¿Quién era?-, pregunto en tono serio.

-Emmett-, susurre sorprendida.

-Emmett-, repitió de la misma forma.

-Le conté…-, le dije mientras llevaba una mano a mi cabello.

-Bella estas bien…-, inquirió mi hermana, me senté en las escaleras de la entrada y ella imito el movimiento

-La ama...la sigue amando-, le susurre y ella rió tenuemente.

-Todo se resolverá Bella…-, susurro mientras me abrazaba.

Yo pedí que sus palabras fueran verdad, no sabia que hacer ahora… no sabia como estar con Edward sin sentir el hueco en el estomago, pero algo en la cara de Emmett me decía que Rosalie podía ser feliz… podía serlo aun después de todo.

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... por fin Emmett regresó... vamos a creerle a Alice y pensemos que todo se resolverá, pero como estará Edward sabiendo que Bella huyó???
cuidense, suspiren y...
Nos leemos en un tris

Bellany G.
**Let us be in love**

3 Comments:

  1. pekelila said...
    asu pobre de edward debe estar sufrinedo x no tenerla cerca primero todo lo que le dijo y ahora huye hay esa bella, pero ps espero k todo se solucione y sean felices
    si wiii por fin salio emmet ya pobre rosalie se merece un poco de felicidad
    Anónimo said...
    Como siempre Bella huyendo, porque no se le quita la mania, jaja, espero q ahora q Emmet regreso Rose lo acepte y Edward busque a Bella, besos (Loquibell)
    Anónimo said...
    ena cullen: dios bellany porfa deja de dejarnos en lo mejor que me va a dar algo porfa preciosa mira que yo te adoro pero a vesces eres un poco diablilla preciosa bueno me encato muchos suspiros de chocolate para las dos gemelis os adoro preciosas

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